(UNA GUERRA NUCLEAR)
El niño sé despertó
en mitad de la noche
al sentir el temblor
de cuatro corceles negros
que, enfurecidos, galopaban
dejando un rastro de destrucción.
Trás una ventana vio a Marte invicto
vestir sus rpajes de guerra
y enlodar la tierra con su ira;
presa del pánico el niño huyó
para ver como un siniestro monje
sé iba adueñando de las sombras.
Las fuerzas del mal se desataron
cuando Eolos aulló con furia
y el cielo escupió fuego.
El niño vio que la fresca hierba
donde él, antes, había retozado
ahora era tierra quemada;
y no pudo comprender el ¿Por qué
un sabio loco pulsó el rojo botón
que sentenciaba a muerte al planeta?
En un claro del bosque
el niño vio una multitud
elevando sus plegarias al cielo;
pero ya era demasado tarde
y, el monje descarnado,
se apresuraba a devorarlos.
En un refugio se cobijó;
y deseo, para siempre, dormirse
al comprender la cruda realidad;
era el único superviviente
de un agonizante planeta
y el estandarte de su necedad
"No sé como será la tercera guerra mundial;
lo único que sé es, que la cuarta, será con piedras y lanzas "
(ALBERT EINSTEIN)